1. Proceda a la ambientación del aula para favorecer la movilidad.
2.Genere la discusión y la participación del grupo.
3.Mantenga el tópico del grupo en este foco en común.
4.Profundice el tema se discusión.
5.Provea una gama de alternativas y recursos de aprendizaje.
6.Procure que los alumnos tengan acceso a información útil.
7.Aumente el nivel de comodidad procurando mezclar tiempos de relajación, análisis y recreación lúdica.
8.Intervenga cuando surgen obstaculos en lo dinámico.
La estrategia más común es el uso de la retroalimentación (feedback); el cual da la oportunidad a los participantes de ver como son persibidos por los demás. A través de esta estrategia los estudiantes aprenden no solo a cerca de sí mismos y de los demás sino también acerca de los procesos que se dan en la dinámica. La retroalimentación puede considerarse una metodología reflexiva metacomunicacional que:
a) Pone en práctica las destrezas de interacción de las personas.
b) Facilita la comunicación.
c) Contribuye al mantenimiento de la dinámica.
El docente necesita reflexionar acerca de la selección de los ejercicios de manera que estos cumplan con las necesidades de los escolares y con la realidad por la que esta pasando el grupo que maneja. Existe una amplia gama de actividades novedosas y creativas, así como juegos y ejercicios que el docente puede utilizar para facilitar y estimular la discusión. Algunas de ellas son:
- Actividades de movilización del cuerpo con el fin de " romper el hielo", generar confianza en el grupo, etc.
- Actividades manuales que despierten la creatividad en torno al tópico que estudiaran.
- Ejercicios escritos, como completar frases , listados, rompecabezas, etc.
- Lecturas.
- Ejercicios de fantasía e imaginación guiados por la visualización.
- Ejercicios de toma de decisiones.
Todas las actividades necesitan ser evaluadas y procesadas por el docente tomando en cuenta el propósito del grupo (significado que tiene la actividad para el aprendizaje de los escolares), el tamaño del grupo (para estimular el tiempo de intervención y evitar exclusiones), el tipo de ejercicio (reflexionar a cerca del impacto, recciones emocionales inesperadas que puedan desencadenar algunas actividades).
Luego de realizar cualquier actividad de grupo, es básico procesar la experiencia para conocer el impacto que la misma ha tenido sobre los niños. Pra iniciar este proceso de discusión el doncente debe propiciar preguntas como: ¿Qué sucedió?, ¿Cuáles pensamientos y emociones se generaron con el ejercicio?, etc.
Lo importante es cerrar la discusión de modo que el niño haga sus conclusiones y elaboren un compromiso de cambio y transfieran esos aprendizajes o los aspectos pertinentes en su vida.
Por ello, es bueno que el docente realice dinámicas productivas, con preguntas orientadas hacia la construcción de procesos reflexivos. Existen diferentes maneras de establecer las categorías de preguntas que el docente puede formular para desarrollar la acción de grupo. De acuerdo con la taxonomía de Blom (1956):
1. Preguntas de conocimiento: basadas en la memoria.
2. Preguntas de comprensión: describir lo que han aprendido.
3. Preguntas de aplicación: uso correcto del aprendizaje para resolver problemas o responder preguntas.
4.Preguntas de análisis: descomponer lo aprendido en partes y encontrar las relaciones.
5.Preguntas de síntesis: integrar las partes para formar una totalidad significativa.
6.Preguntas de evaluación y opinión: emitir juicios personales acerca de los eventos y de las experiencias.
Definitivamente el trabajo en grupo presenta ventajas indiscutibles para promover en el escolar la construcción de saberes y destrezas, en interacción consigo mismo, con los objetos y con los otros para enfrentarse a la complejidad y diversidad de los distintos escenarios sociales a los cuales deberá integrarse.